Fabricados en acero quirúrgico 316L con un acabado plateado pulido, estos pendientes están libres de níquel y son aptos para pieles sensibles. La cruz, de líneas redondeadas, cuelga de una anilla simple; sus superficies lisas y muy pulidas reflejan la luz sin resultar llamativas.
- Acero quirúrgico: El acero inoxidable 316L resiste la corrosión y mantiene su acabado pulido.
- Ajuste cómodo: Bordes suaves y un buen equilibrio en la caída reducen la irritación para uso durante todo el día.
- Fácil de poner: La anilla simple facilita poner y quitar los pendientes.
La cruz colgante queda cerca del lóbulo, con una silueta limpia y minimalista que queda bien con camisas informales o con prendas más arregladas. El acabado en tono plateado es neutro y combina bien con otras piezas metálicas.
Una pieza clásica para cualquier colección masculina.