Construido con titanio y fibra de carbono con un patrón de dientes de engranaje en su superficie. ¿Hay algo más masculino eso?

El titanio lleva el nombre de las criaturas de la antigua mitología griega y, por si piensas que es tan pesado como uno de esos gigantes, debes saber que el titanio pesa casi la mitad que el acero. Este anillo para hombre es resistente a la corrosión, ligero como una pluma y fuerte como... bueno, el titanio.

Procura comprar un anillo de la talla correcta porque es muy difícil cambiar el tamaño de esta bestia. Y si se queda atascado en tu dedo… será mejor que lo dejes ahí. Si realmente lo deseas, tendrás que renunciar a tu dedo. Es broma, quitarlo es bastante fácil.

El color negro del patrón de fibra de carbono se logra mediante la deposición física de vapor, un proceso que implica calentar el nitruro de titanio hasta formar plasma y dispararlo a la superficie del anillo dentro de una cámara de vacío. El resultado es una capa de cerámica superfina que es resistente a los arañazos, duradera y no se quita con el tiempo. El proceso PVD también es más respetuoso con el medio ambiente que otros métodos de recubrimiento y enchapado.

Este anillo te durará más que cualquier otra cosa que tengas en tu arsenal de estilo.

Diseñado en Dinamarca. Se envía en una caja de la firma.